El interno venezolano jugará los dos últimos partidos de la Zona Sur B en la Liga Argentina.
El interno venezolano Kelvin Caraballo, flamante refuerzo de Quilmes para lo que resta de la Liga Argentina de Básquet, llegó el martes a Mar del Plata y por la noche entrenó a las órdenes de Ezequiel Santiago Medina junto a sus nuevos compañeros.
Caraballo llegó por la mañana a la ciudad y de inmediato fue al club a conocer a su entrenador, quien enseguida le propuso un primer contacto con los sistemas que juega el equipo.
Después de un descanso, el venezolano de 2,01 metros y 36 años, volvió al nuevo “José Martínez” por la tarde para entrenar por primera vez con el resto del plantel.
Caraballo se subirá al micro y jugará para Quilmes los dos últimos partidos de la Zona Sur B el viernes ante Pergamino Básquet y el domingo en Chivilcoy frente a Racing.
Quilmes para no depender de otros resultados necesita un triunfo en la gira para asegurar el segundo puesto y así organizar uno de los cuadrangulares de primera fase.
En ese sentido, ayer el presidente Marcelo Jiménez confirmó que, llegado el caso, dicho torneo se jugará en el Microestadio “José Martínez”. “No hay inconveniente para que juguemos en nuestra cancha”, aseguró.